He tenido recientemente la experiencia de romper el Garmin StreetPilot c340 que estaba montado en el tablero de instrumentos de mi coche. Al mismo tiempo, mientras que viajaba desde Midland, Texas a Bishop, California hicimos gran uso de los datos de evasión de obstáculo y terreno en la noche del Garmin 430.

Teniendo allí un dispositivo actualizado y exacto de GPS para proporcionar la información adicional, da una sensación de seguridad y toma de conciencia que es difícil describir. En el mundo de la aviación, hablamos mucho sobre conocimiento circunstancial, que según Wikipedia es:

Conocimiento circunstancial es el término correcto para el campo del estudio que se refiere al conocimiento y comprensión de un ambiente crítico donde se necesitan tomar decisiones en áreas complejas tales como aviación, control aéreo, conducción, operaciones de central eléctrica y comando y control militar.

Es decir, todo es acerca de tener la información que necesitas para formar una clara, exacta y completa imagen en tu mente. Esto es, una imagen de lo que está sucediendo a tu alrededor y cómo es probable cambiarlo en un futuro próximo.

El GPS, como muchos dispositivos, puede ser un valor asombroso. Descarga el trabajo de adquisición y organización de información, presentándolo en porciones fáciles de digerir que pueden ser integrados rápidamente en tu imagen de la situación.

Utilizados bien, tales dispositivos te dan la confianza para hacer cosas que puede ser que no hagas sin ellos. Pero hay un costo oculto asociado a tenerlos cerca. Hay una curva de aprendizaje requerida para utilizarlos y configurarlos eficientemente. En una situación de alta tensión, no tienes tiempo para parar y leer el manual o dudar lo que te está diciendo.

Eso significa no sólo que tienes que conseguir recuperarte de esa curva inicial de aprendizaje, también tienes que pasar un cierto tiempo configurando el dispositivo para obtener solamente la información que necesitas realmente. Hay un gran peligro de que estos dispositivos de lujo puedan proveerte información innecesaria e incluso potencialmente desorientadora.

Conducir sin el c340 es un poco desconcertante. Lo he tenido por un par de años y todavía deseo que estuviera allí, diciéndome lo que necesito saber. Es un verdadero recordatorio de cuánto ayudaba a aumentar mi conocimiento circunstancial sin aumentar mi carga de trabajo.